Este antiguo edificio fue alguna vez una preparatoria y en su interior resguarda historias de hace varias décadas. Su arquitectura y el arte mural que hay aquí no se comparan con nada. Siempre encontrarás exposiciones temporales y otras más fijas que no te defraudan. Además es una buena forma de conocer los espacios más emblemáticos del Centro Histórico de manera amena y calmada. Si te gusta la fotografía, saldrás de aquí feliz, con tu memoria llena de instantáneas increíbles. Uno de los sitios preferidos para relajarse.
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Este antiguo edificio fue alguna vez una preparatoria y en su interior resguarda historias de hace varias décadas. Su arquitectura y el arte mural que hay aquí no se comparan con nada. Siempre encontrarás exposiciones temporales y otras más fijas que no te defraudan. Además es una buena forma de conocer los espacios más emblemáticos del Centro Histórico de manera amena y calmada. Si te gusta la fotografía, saldrás de aquí feliz, con tu memoria llena de instantáneas increíbles. Uno de los sitios preferidos para relajarse.
Edificio majestuoso, digno de conocer y recorrer. Las exposiciones son muy buenas, lo mejor del museo son los murales, especialmente me gustaron los de Orosco. Los martes la entrada es libre.
Exposición de Ron Mueck hasta el 5 de febrero de 2012