Pazo As Casas

Un lugar para descansar y disfrutar del entorno. La atención de la propietaria fue de 10. Su amabilidad y cercanía te hace la estancia maravillosa. La habitación muy limpia y espaciosa, al igual que el baño. Genial para ir con tu perro, al que tratan como si fuera de ellos. Pueden acceder a todas las estancias comunes a diferencia de otros sitios.

Es lo que buscábamos, entorno natural, donde disfrutar de unas vistas estupendas y sobre todo de una paz y una tranquilidad muy recomendables Y que decir del pazo, un sitio con un encanto espectacular,muy bien cuidado por sus anfitriones,con un trato excepcional por parte de éstos y una calidad humana dificil de encontrar en estos tiempos. Ideal si se va con mascotas,si puedo volvere a repetir,saludos desde Melilla

Si tienes familia en Galicia sabes lo que pasa cuando llegas que te reciben con los brazos abiertos y llenos de generosidad y afecto, pues lo mismo nos ha pasado al llegar al pazo As Casas, con Yolanda que todas las palabras de elogio son pocas, es de las personas más riquiñas que te puedas imaginar, te atiende de maravillas, y a su vez respeta tu espacio y no te agobia con ofrecerte cosas, la información de la zona la controla de maravillas y si eres pet friendly es el sitio ideal porque los perros hacen vida social como los huespedes, el desayuno está preparado con mucho mimo con productos de la tierra y ya tienes tu mesa reservada por la mañana según tu habitación, la limpieza es excelente no hay nada que reclamar para estar ella sola con Javi que es su ayudante por excelencia y otra persona increible de conocer. Si te quieres quedar a cenar les avisas y te preparan algo rico y por supuesto el mega detalle es la cantina, un lugar donde tu vas y te sirves tus estrellas o lo que quieras y luego ya arreglas cuentas al final , todo es disfrute y mucha mucha desconexión, muy bien comunicado con Chantada y la señalización para llegar está muy bien. Sin lugar a dudar una excelente opción limpieza, alojamiento, instalaciones calidad de la comida y la atención super esmerada que cuesta tener que irse como te pasa cuando vas a ver a tu familia. Gracias Yolanda y Javi por tanto afecto y cuidarnos en tan pocos días. Sergio y Antonio

Nuestra experiencia en cuanto al encanto del entorno, el pazo y los jardines, la cena sabrosa del menú 1, el desayuno, la acogida a los perretes y la amabilidad de Yolanda fue buena. He opinado en Booking q, para nuestro gusto, la habitación necesita un retoque. Que yo, personalmente, pasé algo de frío en la habitación a pesar q de q en el día llegamos a 26 grados, quizás por las paredes de piedra gruesas q aíslan mucho ( motivo por el q ya avisáis con antelación que no hay cobertura) así como que, desde la habitación se escucha a la perfección las conversaciones que se dan en las mesas de las terrazas que dan a la misma, por las q hay q pasar sí o sí. Sí hay clientes allí e incluso estáis allí vosotros es de buena educación saludar o decir unas palabras al pasar,ven ningún momento nos sentamos pero, es vuestro entender. Hablo con conocimiento pues el Domingo tras el desayuno, me encontré mal y tuve q acostarme de nuevo, gracias a q vuestro check out era a las 13 h. Por ese motivo, mi marido se encargó de pasear a la cachorra Cloe y dejarme descansar para emprender la vuelta. Y, desgraciadamente, en ese paseo x vuestros jardines Cloe se lastimó jugando y vino coja, con una patita doblada q no estiraba ni apoyaba. Al verla así, me levanté ya y salimos a todo correr. No sin antes llevar a correr la llave al chico encargado y de querer pagar la consumición de la cantina. De hecho, una de las huéspedes se ofreció a ayudarme con bolsas puesto q llevaba a Cloe en el colo. Por ello, tal como le comentamos a Yolanda rápido (mientras atendía a otros clientes en el desayuno q de 01:30 a 4:00 H no pegamos ojo por algún animalito q se coló y se sentía rascar seguido la pared contigua separamos cómoda, abrimos cajones de armario, etc. ), también le hubiéramos comentado el resto. Al irnos nuestra preocupación máxima era Cloe y no pararnos a comentar todo esto q . Siento que la reseña de Booking no fuese de vuestro agrado para manifestarlo enviándome a q alquile una casa en su totalidad para estar solos. No es de buen gusto ni buena educación, al menos, dentro de lo que yo entiendo. Y no es q el cliente tenga la razón pq soy la primera en pensar q no es así pero, ojo!!He expuesto mi valoración con toda la educación . Yo sólo expongo mi experiencia personal tal como la hemos vivido . Por supuesto, se hace amarga al leer vuestra reacción a la q no puedo contestar pq Booking no da esa opción. Por cierto, Cloe ya está mejor que sé que la tratasteis muy bien. Saludos a Boquerón q fue un encanto de anfitrión con ella.

Es lo que buscábamos...el pazo increíble..precioso...en un sitio maravilloso..un remanso de paz..todo superlimpio y muy bien cuidado.Ideal para conocer la Ribeira Sacra.La habitación muy espaciosa y cómoda,muy acogedora...el desayuno bien también,las mascotas son muy bienvenidas..y el trato de Yolanda genial,te da indicaciones de todo y te hace sentir como en casa.Teneis que ir...gracias por todo y esperamos poder volver!!!😉😘

Pasamos dos noches en pareja. La ubicación (para hacer senderismo) espectacular. El pazo, de piedra, sorprendente y con zonas comunes muy agradables y cuidadas. La habitación con encanto. Estuvimos en una suite con jacuzzi. El trato de la dueña magnífico. Sitio completamente recomendable.

Es mi segundo año en el el Pazo. El año pasado pude disfrutar tanto del pazo como de sus alrededores haciendo varias rutas de asombroso valor artístico por el románico de la zona, contemplar el marco natural incomparable de la ribera sacra y degustar platos típicos. Este año buscaba tranquilidad, tiempo para disfrutar de mis dos perritas y sabía que el pazo era el lugar idóneo también. Gracias a la atención, mimo, cariño, trato excelente que tanto Yolanda como Javier me han brindado he vivido diez días que han sido un auténtico bálsamo para el cuerpo y el alma. También Alma y Ari, mis perritas han gozado a lo grande de este maravilloso lugar y su gente extraordinaria.