Estuvimos unos días en Julio-2022, la recepcionista nos dio muy buena información de como realizar paseos por nuestra cuenta y nos brindaron una habitación muy cómoda lejos del ruido de la calle. La piscina es de tamaño regular pero no tuvimos tiempo de usarla por que siempre estuvimos paseando en la ciudad y alrededores. Lo que me gusto es que estuvimos muy cerca del famoso restaurante Blanquita donde se come super delicioso y barato comida típica a pesar que solo abre desde las 4:00 pm valía la pena esperar. Además el hotel está a dos cuadras del mercado Belén que si bien es cierto hay desorden pero puedes comprar algunos recuerdos y alimentos (la cercanía no afecta el servicio del hotel). En términos generales el hotel es cómodo y seguro (a dos casas hay una dependencia policial).
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